El blog de aquellos maravillosos años

El corazón de las tinieblas

Joseph Conrad

El corazón de las tinieblas
La tremenda masacre del Congo, perpetrada en tres años por Leopoldo II, rey de Bélgica, supuso una experiencia irreversible para Joseph Conrad, que llegó y desencantado de sus ingenuos ideales de juventud, desnudó la noble causa de Europa y el espíritu expoliador de los Imperiales. Marlow, alter ego del autor, narra un viaje a través de las profundidades del río africano, regresa con el misterioso jefe de una explotación de Marfil, los métodos utilizados están dañando los intereses de la empresa: Kurtz es una figura implacable y cruel, pero al mismo tiempo venerada por los propios nativos, y cuya dimensión se agiganta conforme avanza la historia. El arte de Breccia se expresa con singular dominio de las tensiones del conflicto relativo entre las fuerzas latentes y brutales de la condición humana y las indomables tinieblas de la selva.

El horror, un régimen de explotación que entre 1880 y 1920, se estima que diezmó la población en unas 10 millones de personas, la mitad del total.

Joseph Conrad (Berdyczów, 1857), es un escritor británico de origen polaco. Debido a la profundidad de su obra, en la que analiza los rincones más débiles y oscuros del alma humana, está considerado uno de los grandes autores en lengua inglesa del S.XIX.

Conrad nació en el seno de una familia noble, muy activa dentro de los movimientos nacionalista polacos, algo que supuso su exilio tras la insurrección polaca sucedida en 1863. Tras quedar huérfano marchó a Marsella donde, a los 17 años, se enroló como marinero en un barco mercante.

De sus experiencias como marino por las costas de Sudamérica, India o África se nutren muchos de sus posteriores relatos, así como de sus vivencias durante las guerras Carlistas en España, donde luchó del lado del Archiduque. Nacionalizado inglés tras varios años enrolado en la Royal Navy decidió retirarse a los 38 años para dedicarse de manera íntegra a la escritura. Comenzó a escribir en inglés, cuya escritura no dominaba al principio en favor de idiomas como el polaco o el francés.

Es importante su visita al Congo Belga en 1888, donde constató las atrocidades cometidas con la población indígena, algo que sentaría las bases de una de sus novelas más famosas, El corazón de las tinieblas. Conrad también escribió algunos de los clásicos de la novela de aventuras, como Lord Jim o Un vagabundo en las islas. Su estilo está influenciado por el romanticismo pese a tratar sus relatos con una gran dosis de realismo. Joseph Conrad murió en Bishopsbourne el 3 de agosto de 1924.

Imagen de fondo: El río Congo se convierte en una angustiosa travesía a través del corazón de las tinieblas. Muerte, horror y las peores atrocidades (Ver)

No opinamos sobre lo que leemos

No opinamos sobre los libros que leemos. Porque cada lector crea un libro diferente, lo modula, en ese proceso casi mágico de convertir un montón de palabras en una experiencia personal íntima y profunda, imaginando los escenarios y los personajes, compartiendo sus vivencias y metiéndonos en su piel. Somos testigos mudos.

Sólo en las reuniones de grupo comentamos si nos ha gustado poco o mucho el libro, porque nuestra opinión, publicada, podría llevar a alguien a no leerlo. Y eso sí que sería imperdonable. Mejor léanlo.

¡Ah, el horror! ¡El horror!

Las últimas palabras de Kurtz en la obra "El corazón de las tinieblas", como llamaban al Congo, colonia adjudicada al monarca belga Leopoldo II (no a su Corona), propiedad de una figura que en su época fue reconocida y admirada en toda Europa como un filántropo. Sin embargo, bajo la fachada de un carácter humanista, fue posible el horror, un régimen de explotación que en un territorio 76 veces más grande que Bélgica, entre 1880 y 1920, se estima que diezmó la población en unas 10 millones de personas, la mitad del total.