La lectura infinita
El jugador
Fiodor Dostoyevsky
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Novela de indudable trasfondo autobiográfico, El jugador es una pieza básica en el edificio de la obra de Dostoyevski, conteniendo absolutamente todas las características de sus novelas más famosas, esto es, morbosidad, dramatismo, tensión casi intolerable, agresividad y revelación punzante y sutil de estados anímicos vividos y superados por el genial escritor. Dos pasiones principales campean en este libro: la del juego, que envenenó a Dostoyevski, hasta pocos años antes de morir, y la de un amor hecho de humillaciones, equívocos, odios y abnegación quijotesca. El jugador presenta una galería de personajes desarraigados, patéticos y trashumantes que deambulan por la ciudad-balneario de Wiesbaden (el «Roulettenburg» de la ficción).

Fiódor Mijailovich Dostoievsky  (Moscú, 1821) Novelista ruso, uno de los más apreciados representantes de la literatura realista en su país y uno de los grandes genios de la narrativa europea decimonónica. Educado por su padre, un médico de carácter despótico y brutal, encontró protección y cariño en su madre, que murió prematuramente. Al quedar viudo, el padre se entregó al alcohol, y envió finalmente a su hijo a la Escuela de Ingenieros de San Petersburgo, lo que no impidió que el joven Dostoievski se apasionara por la literatura y empezara a desarrollar sus cualidades de escritor.

Al terminar sus estudios, tenía veinte años; decidió entonces permanecer en San Petersburgo, donde ganó algún dinero realizando traducciones. Allí publicó su primera novela en 1846, con la que obvtuvo un éxito efímero. En 1849 fue condenado a muerte por su colaboración con determinados grupos liberales y revolucionarios, pero fue indultado momentos antes de su ejecución y estuvo cuatro años en un presidio de Siberia.

De regreso a San Petersburgo, volvió a publicar recuperando su antigua celebridad, en especial con “Crimen y castigo”, la primera de las grandes novelas que lo consagraron definitivamente como uno de los mayores genios de su época. Presionado por sus acreedores dejó Rusia y viajó por Europa junto a su nueva y joven esposa, Ana Grigorievna y en 1880 publicó “Los hermanos Karamazov”, que el propio escritor consideró su obra maestra.

Murió en San Petersburgo en 1881.